lunes, 10 de junio de 2013

Scamper

Como último trabajo de este semestre, hemos realizado un Scamper sobre un cuento tradicional. El Scamper es una técnica que favorece la generación de ideas a partir del planteamiento de un mecanismo tan sencillo y tan potente en el ámbito educativo como la pregunta. Además, estimula un aprendizaje constructivo y puede servir para crear nuevos recursos y como una herramienta metodológica.
La aplicación sobre un cuento ayuda a desarrollar la Competencia en comunicación lingüística y su uso sobre trabajos como una pintura, un póster publicitario nos conduce directamente hacia la Competencia Cultural y artística.
Se trata de hacer una adaptación de un cuento, cambiando lo que viésemos conveniente de él a pesar de mantener lo esencial. A partir de ahí inventamos la historia y la representamos con diferentes materiales.
El cuento que hemos elegido en mi grupo ha sido: "El lugar más maravilloso del mundo", haciendo una adaptación de él con los diferentes personajes y lugares que aparecen en el cuento, e incluso, el título.
El cuento original, trata de una rana llamada Boris, la cual vivía en un estanque y prueba a irse a vivir a otros lugares hasta encontrar un río donde había un pato y se enamora de ella... En nuestro cuento modificado, la rana se llama Tana, la cual busca diferentes lugares hasta encontrar uno donde poder quedarse, ya que en su estanque las demás ranas no la aceptaban...
A continuación, os dejo con la adaptación de nuestro cuento:


“Un lugar donde poder vivir”

Érase una vez una pequeña rana, llamada Tana, que vivía en un hermoso estanque con otras ranas y, esta bailaba sevillanas todas las mañanas. El agua del estanque estaba fresca y clara, y abundaban sabrosas moscas. Su casa era una flor un tanto rara, un nenúfar. 

Un día caluroso, mientras bailaba, vio que una avalancha de ranas se acercaba. 
- Tana, no aguantamos más tus bailes y cantes de por las mañanas, te tendrás que ir de este estanque, si no hoy, mañana. 

La pequeña rana triste cogió sus vestidos de lunares y sus peinetas de colores y, se fue en busca de un nuevo lugar donde vivir. 

Saltó y saltó hasta que un nuevo lugar encontró. Pensó en quitarse su vestido de gitana y hacerse pasar por una trucha. Se acercó a ellas y les dijo:

- ¡Hola! Soy nueva en este estanque, ¿puedo quedarme a vivir con vosotras?
- Eres muy pequeña para ser una trucha, si quieres quedarte tendrás que ganarme en una carrera. 

Tana y la trucha se entrenaron duro para la carrera. Y llegó el gran día. 

- ¡Preparados! ¡Listos! ¡Ya!

Nadando con todas sus ganas a Tana se les iban cayendo las escamas. Todas las truchas asombradas la miraron decepcionadas.

- ¡Vete de aquí y no vuelvas!

Volvió a buscar otro sitio donde poder vivir y, entonces encontró un lugar húmedo, un fango lleno de sapos. Con barro, Tana, se puso verrugas en el cuerpo y en la cara para hacerse pasar por sapo. Entró en una charca que había cerca y les dijo:

- ¡Hola! Soy nueva en esta charca, ¿puedo quedarme a vivir con vosotros?
- Tendrás que saltar conmigo hasta cansarte, si aguantas más que yo serás uno de nosotros.
- ¡Preparados! ¡Listos! ¡Ya! 

Salto a salto el barro se iba despegando, hasta que un sapo que la estaba observando se dio cuenta y le dijo:

- ¡Tus verrugas son de mentira! ¡Tú no eres un sapo vete a un charco!

La pequeña rana Tana, triste y desolada, fue a un río solitario. Al rato, llegaron unos cisnes y, corriendo Tana se escondió y se fabricó un pico con una cáscara de guisantes y, se puso en el trasero una pluma. Se acercó a los cisnes y les dijo:

- ¡Hola! Soy nueva en este río, ¿puedo quedarme a vivir con vosotros?

Un cisne le contestó: 

- ¡Sacúdete con nosotros y comprobaremos que eres uno más!

Cuando Tana se sacudió, el pico y la pluma se le cayó. 

- ¡Nos has mentido! ¡Tú no eres un cisne! ¡Vete de este río, aquí te morirías de frío!

Tana, cansada, no quería volver a intentar hacerse pasar por ningún animal más. Por lo que visitó un último lugar, una bella laguna, tan bella como ninguna, donde había un grupo de flamencos. Tana se escondió en un sitio aislado y oscuro hasta que un flamenco la vio, se acercó y le dijo:

- ¿Qué haces aquí tan sola? ¿No vienes con ninguna rana?

Tana, asustada, contestó: 

- No tengo sitio donde quedarme porque las otras ranas no querían vivir conmigo en el estanque.
- Podrás quedarte aquí y te buscaremos un bonito nenúfar donde puedas vivir. 

Felices celebraron su llegada, con cantes y sevillanas, así Tana pudo volver a ponerse su vestido de gitana. 

Al día siguiente, por la mañana, vieron acercarse a un gran grupo de ranas. 
Los flamencos para proteger a Tana, abrieron sus alas como si allí no hubiese nada. 

Una rana preguntó: 

- ¿Podemos quedarnos aquí? Nuestro estanque se secó y no tenemos sitio donde ir. 
- ¡Ni pensarlo! – dijo un flamenco, ya que sabían lo que les habían hecho a Tana. 
- Habéis sido muy malas no dejando vivir a otra rana. 

Pero Tana era una buena rana y les dijo que se quedaran. Las demás cuando la vieron perdón les pidieron, y así felices vivieron.


FIN





jueves, 6 de junio de 2013

Ficha del libro: "Anita anota"

Esta actividad ha consistido en escoger un libro de la biblioteca destinado a niñas y niños de Educación Infantil, rellenando posteriormente una ficha del libro elegido.
Yo he escogido el libro "Anita anota", un cuento cuyo autor es Osvaldo P. Amelio – Ortiz y las ilustraciones de Osvaldo P. Amelio Ortiz y Andrea Rodríguez Vidal. 
El cuento trata de temas como la felicidad, la armonía personal y las cosas más significativas que pueden ocurrirnos a lo largo de uno de nuestros días. 
Cuenta la historia de una niña llamada Anita, la cual es tan meticulosa y ordenada que toma nota de todo lo que le sucede en cada momento de su vida. Este cuento es un recorrido visual que nos permite apreciar, a través de las notas de Anita, la vida con gran intensidad, descubriendo valores nuevos a cada paso y en cada acción. En definitiva, nos ayuda a descubrir nuestro maravilloso tránsito por las cosas simples. 
Por otro lado, en cuanto a los aspectos pedagógicos-didácticos, la longitud del libro lo hace apto para primeros lectores. El tamaño de la letra es adecuado, según nuestro criterio, para lectores menores de 6 años. El lenguaje es fácil y comprensible.
Este libro puede llamar la atención por el formato, el cual aparece en letras mayúsculas, pero sobre todo las ilustraciones de gran colorido.
Las ilustraciones ocupan casi la totalidad del libro, son divertidas y complementan el texto breve que las acompaña, el cual aparece en letras mayúsculas para una mejor comprensión.
Como rasgo curioso, destacar que, gracias a las imágenes o ilustraciones que presenta, los niños pueden identificar mejor lo que se cuenta en el texto de este, es decir, conforme el lector avanza leyendo el formato del texto, les atraerá la consecución de imágenes que se van mostrando con una mejor comprensión, en las cuales se explican varias acciones acordes a la ilustraciones que se presentan, como las notas de una canción, apareciendo un pentagrama con notas, y el personaje principal del libro, “Anita”. 
En cuanto a las actividades he propuesto las siguientes: 
Actividad 1. Antes de la lecturaPodemos jugar, antes de abrir el libro, a ver y utilizar un pequeño cuaderno o libreta,  donde los niños anoten sus experiencias más significativas durante la clase, o algo que les guste como su animal, color, canción, etc., que sean favoritos, y lo puedan seguir utilizando en casa junto a sus padres. Establecer un diálogo para ver si son las mismas cosas que propone el propio lector del libro y ver en qué se diferencian.
Actividad 2. Durante la lecturaAbriremos el libro con los niños para descubrir las distintas ilustraciones que hay, además de su formato; posteriormente, dialogaremos con ellos mientras contamos el cuento, haciéndole preguntas como pueden ser: ¿Qué creéis que va a anotar Anita?, ¿Qué está anotando Anita?, ¿Qué podemos ver en esta imagen?, etc.; de esta manera conseguiremos que los niños/as nos cuenten las diferencias que ven entre el libro y en la realidad.
Actividad 3. Al final de la lecturaLos niños y niñas realizarán, principalmente en el aula, junto a la maestra, un cuaderno de gran tamaño, en el cual aparecerán diferentes anotaciones relacionadas con el cuento y cómo ellos se sienten o quieren expresar (mediante frases, palabras,…), después de la lectura, e incluso, se incluirán diferentes hojas de papel al agua. Con esta actividad de “papel al agua” los niños/as la llevarán a cabo en el patio, donde podrán observar las distintas gamas de colores que se pueden conseguir con las diferentes pinturas y con el agua, una vez se haya secado dicha hoja o papel. De esta manera, conseguiremos atraer y motivar más a los niños/as por querer expresar cómo se sienten ellos ese día (anotando palabras, dibujos,…) y, también, lo que más les llamaría la atención, tras esta lectura, como son las ilustraciones llenas de gran colorido.